Puedes elegir un momento concreto para elaborarlo, por ejemplo la tarde o la noche del domingo, pero como es algo muy personal, debes escoger el más adecuado para ti. Eso sí, debes hacerlo siempre. Si estudias sin haberte planificado antes, es muy posible que te olvides de hacer algún ejercicio o te dediques a una asignatura que no te urge tanto como otra. Tienes que establecer tus prioridades y el tiempo de dedicación, esto es básico para sacarle el máximo partido a tu tiempo de estudio.
Un buen plan de estudio debe contemplar los siguientes aspectos:
• Estudia todos los días a la misma hora y en el mismo lugar. ¡Es la regla de oro! Ya hemos explicado su importancia en el documento anterior, El método de estudio.
• Tener a mano el horario de clase antes de elaborar el plan y también tu agenda escolar con las anotaciones de los ejercicios, controles, exámenes que tienes que hacer y las fechas correspondientes.
• Escoger el momento idóneo para estudiar. Esto es algo muy personal. Puedes tener en cuenta que, por la mañana, se aprende más rápido y se olvida antes y por la tarde/noche se aprende más lentamente pero se tarda más en olvidar.
• Las horas que debes dedicar al estudio depende de tu capacidad y de la dificultad de las materias.
• Es conveniente cambiar de asignatura cada 40 minutos, aproximadamente y descansar 5 minutos entre una y otra.
• Conviene comenzar la sesión diaria de estudio con tareas de dificultad media, después continuar con difíciles, dejando las más fáciles para el final. Todo ello de acuerdo con tu capacidad de concentración. Al principio, ésta no es total y al final estarás cansado. Entre ambos períodos, existe un tiempo en el que la concentración es mayor, por eso en este intervalo conviene dedicarse a las tareas más difíciles.
Además de lo anterior, si quieres que tu estudio sea eficaz debes tener en cuenta que estudiar supone también hacer otras cosas como:
• Repasar lo que el profesor ha explicado. Esto te ayudará a afianzarlo y luego te será más fácil recordarlo.
• Finalizar las tareas que no te dio tiempo a terminar en clase.
• Realizar lecturas de ampliación y de profundización. Siempre que puedas, y esto depende de cómo te organices, debes ir más allá de lo que te explique el profesor. ¡Estimula tu curiosidad!
Para contribuir a consolidar tus hábitos de estudio debes:
• Estudiar siempre dentro del horario que tú mismo has programado. Si ves que no se adapta a tu realidad cotidiana, lo que debes hacer es volverte a plantear el horario.
• Saber cuándo acabará tu tiempo de estudio. El hecho de conocer desde el principio el tiempo que vas a dedicar a estudiar, te puede servir de motivación y te ayudará a ponerle empeño.
• Premiarte cuando has terminado el tiempo de estudio que habías programado. Hazlo realizando alguna actividad “saludable” que te guste mucho: escuchar tu música preferida, llamar a un amigo/a, ver un programa de TV que sigas habitualmente…
Cuestionario sobre la planificación del estudio
NO
A VECES
Siempre tengo delante, en mi mesa de estudio, el horario de las actividades de clase
Antes de empezar a estudiar, sé qué actividades voy a realizar y en qué orden
Estudio todos los días
Distribuyo adecuadamente mis horas de trabajo y de ocio
Estudio siempre a la misma hora
Estudio siempre en el mismo lugar
Cuando algún día no puedo estudiar, lo recupero en el fin de semana
Trabajo en casa todos los días un mínimo de dos horas
Cada cuarenta minutos aproximadamente suelo cambiar de actividad
Descanso unos minutos cada vez que cambio de actividad
Comienzo estudiando las materias de dificultad media, luego sigo con las más difíciles y termino con las más fáciles
Termino todas las tareas que me han quedado incompletas
Repaso los temas trabajados en clase
Preparo el trabajo para el día siguiente
Intento buscar información para ampliar ciertos temas
https://youtu.be/e20vYbKu-jE
ResponderEliminarhttps://youtu.be/HXXOrTL2i7E
ResponderEliminarhttps://youtu.be/P6LxJCAStDU
ResponderEliminarhttps://youtu.be/FfJvKXwbsIg
ResponderEliminarhttps://youtu.be/TT9Gqk98_HE
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